La marca de culto suiza.

La bebida Ovomaltine se desarrolló hace más de 110 años como producto reconstituyente. A día de hoy, en más de 100 países ya forma parte del desayuno igual que unas tostadas y un café.

Hace tiempo que la fórmula mágica del farmacéutico Albert Wander se ha convertido en una amplia gama de productos de primera calidad. Lo que no ha cambiado es el amor por Ovo, que se transmite de generación en generación.

En la actualidad, la marca de culto es una de las marcas más conocidas y apreciadas de Suiza. Ovomaltine es energía sutil con un sabor incomparable de malta y cacao que te ayuda a seguir: no lo harás mejor, pero sí durante más tiempo. Así reza su eslogan.

El DS8 en naranja, el color de la empresa, con el logotipo de Ovo en el clip se identifica al instante como embajador de la marca.

La publicidad original y ligeramente irónica forma parte de la inconfundible forma de comunicarse de Ovo. El DS8 en naranja, el color de la empresa, con el logotipo de Ovo en el clip y el hashtag Ovopower en el cuerpo se identifica al instante como embajador de la marca. El clip y el botón de presión transparentes. La carcasa, con acabado Soft touch. Naturalmente, con una mina duradera de bajo impacto ambiental.

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